Semana 10, 11, 12 y 3er. finde – Reflexión #ElJuegoDeMiVida
Me encontré con otro yo y con otros ellos. En las últimas semanas el encuentro con el equipo me confirmó lo importante de honrar la palabra, de enfocarse, de mirar eso que nos desvía de nuestras metas, mirar eso que sabotea nuestro propósito, mirar a ese o a eso a quien responsabilizamos de nuestras brechas. Aprendizaje: Nunca es el otro, siempre somos cada uno de nosotros.
Nos hicimos permeables. Cada uno de nosotros nos permitimos, con la guía de nuestros guías, permear al otro y dejarnos permear desde la responsabilidad, la colaboración, el respeto, la empatía y sobre todo, desde el amor riguroso. Eso no quitó la diversión. Mi capitana me interpeló al observar que yo estaba poniendo a un otro en prioridad y no a mi y me dijo: Jose, no seas pelotudo. Pelotudo es una expresión como decir: no te hagas el tonto, el gafo. Eso no tuvo precio. Lo aprecié enormemente.
Llegué al 93% de mis metas. Ellos me votaron al 100% y yo jugué al 100%. Una cosa es obtener resultados, medirlos con respecto a los propuesto y otra cosa es medir al jugador, sus habilidades y sentires. Aunque no logremos el resultado podemos mirar más allá para medir lo que realmente importa: la disciplina, la definición de metas, el enfoque, la valentía, el coraje, la vulnerabilidad, la empatía, la diversión, la libertad, la seguridad, la resiliencia, la compasión, la inspiración, la disrupción, la genuinidad, la ética, la organización, la innovación, la creatividad, la planificación y la calma ambición. Aprendí la importancia de mirar y alinear estas “cosas” con mi razón y mis sensaciones. Que importante es estar preguntándose con cada acción: ¿Cómo me siento? y cómo me quiero sentir. Para tomar una decisión e ir por ella.
Mi serie favorita. Esto es mil veces más aleccionador y emocionante que cualquier serie en televisión. Cada historia escondida en cada uno de nosotros fue el mejor libro de desarrollo personal que haya leído. Cada uno de nosotros mostramos de qué queremos estar hechos ¿De valentía? ¿De coraje? ¿De disciplina? ¿De amor propio y para el otro? Pues fue el fin de semana perfecto para practicarnos en lo que declaramos ser. ¿Con miedo? Sí, de ese que te hace temblar hasta el cabello pero cuando lo enfrentas y lo dice o haces, el sentido de libertad, seguridad y empoderamiento es inmensurable. No hay un sistema de medición para eso que sientes y que se apodera de ti o tú de él. Es como la píldora azul de Matrix, créanme.
Esto “raro”. Eso siempre lo he comentado. Suceden cosas “raras” allí. Y nada que ver con magia, ilusiones, religiones, sectas, adoraciones, ni mucho menos encantamientos. Es un suceso humanos dentro de la mente, el cuerpo y el corazón. He investigado mucho y esas neuronas que tenemos en todo nuestro ser se reconectan, otras dejan de controlarnos y otras empiezan a conectarse con lo nuevo, con el futuro que deseas. Empiezas a llegar a tu potencial. Un mundo protagonizado por la palabra POSIBILIDAD acompañada con una sensación de plena seguridad. Me encanta decir que no creo en la ficción sino que vivimos dentro de ella. ¿Loco? Sí, pero te invito a vivirlo y que me cuentes.
Pasaron cosas en el 3er. fin de semana. Un finde para reconocernos en posibilidad. Y así fue. Todos y cada uno, en su elección, en su mundo, en su sentir, logramos lo que fuimos a buscar: LIDERAZGO DE NUESTRO SER.
Prometo diseccionar toda la estructura que sé que muchos desean como por ejemplo cómo definir el alcance de un proyecto como este, cómo definir metas efectivas, cómo crear un propósito, cómo diseñar un plan para esto pero créanme, no es lo más importante. Lo más importante es pasar por experiencia con el equipo, con lo que sientes en este momento, con tu incertidumbre acerca de esto y de ti, con lo que ni siquiera entiendes y, sobre todo, con la calidad de estos coaches. ¿Es abstracto? Sí. Muy abstracto. Esto es para quienes sienten un llamado interior a ser un humano, ni mejor, ni otro, sino uno realmente empoderado.
Te deseo tu propio liderazgo.